photo of senior woman talking with doctor on tablet

Suleima Salgado tiene una tía de 86 años llamada Rosa que vive en Puerto Rico, a 1,500 millas de distancia de donde reside Suleima. Cuando Rosa tiene una cita médica, debe levantarse temprano a las siete de la mañana. Tras ducharse, empaca un almuerzo y algunos bocadillos, y se dirige al consultorio de su médico, donde a menudo debe esperar hasta seis horas para ser atendida.

“Si pudiera gestionar una cita de telemedicina para mi tía, todo sería mucho más sencillo. Ella podría permanecer en casa, dedicándose a lo que disfruta, hasta que llegue el momento de ponerse en contacto con su médico,” dice Salgado. Salgado es directora del Southeastern Telehealth Resource Center (Centro de Recursos de Telesalud del Sureste) con sede en Atlanta. Ella comprende la importancia de la telemedicina, especialmente para las personas mayores.

Los adultos mayores y la tecnología de la salud

Aunque algunas personas asumen que los adultos mayores no se adaptan bien a la tecnología, la realidad es diferente. “Muchos adultos mayores se han familiarizado rápidamente con la tecnología,” afirma Salgado. Sin darse cuenta de que están participando en la telemedicina, ellos utilizan teléfonos inteligentes, aplicaciones y dispositivos portátiles para cuidar su salud.

Los estudios clínicos respaldan esta tendencia. Una pequeña encuesta publicada en la revista JMIR Aging (la Revista de investigación médica por Internet—envejecimiento) reveló que muchos adultos mayores ya emplean monitores de actividad física y otros dispositivos para mejorar su bienestar. Además, una encuesta más amplia con 208 adultos mayores, publicada en el Journal of the American Geriatrics Society (la Revista de la sociedad americana de geriatría), mostró que aquellos que utilizaron la telemedicina para consultas con sus médicos de atención primaria durante la pandemia quedaron satisfechos con la experiencia. Además, expresaron su deseo de seguir teniendo citas de telemedicina incluso después de que la pandemia termine.

Según los pacientes que interactúan con Salgado, los médicos parecen ser más atentos durante las visitas de telemedicina que en las visitas en persona. Salgado sugiere que esto podría deberse a que los médicos pueden concentrarse mejor en la privacidad de sus consultorios durante las citas virtuales. En contraste, en las clínicas llenas de gente, puede ser más difícil mantener la concentración al entrar y salir de varias salas de examen.

Kevin Biese, doctor en medicina y director de la división de medicina de emergencias geriátricas en la facultad de medicina de la University of North Carolina en Chapel Hill (la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill), señala que la telemedicina y la tecnología de salud móvil “se basan en tecnologías que, francamente, no son muy innovadoras.”

“Mi mamá siempre se comunica con sus nietos a través de FaceTime,” dice el Dr. Biese. “Lo que realmente marca la vanguardia no es tanto la tecnología en sí, sino la forma en que la incorporamos para beneficiar la salud de los adultos mayores.”

Los beneficios de la telemedicina para los adultos mayores

Incluso para los adultos jóvenes y sanos, una visita médica anual puede llevar medio día si consideramos el tiempo de desplazamiento hasta la clínica y las esperas. Sin embargo, las personas mayores suelen acudir al médico con mayor frecuencia. Para ellos, el viaje a la clínica puede ser más prolongado y, en ocasiones, requerir la asistencia de otras personas.

“Una de las formas más significativas en que la telemedicina beneficia a los adultos mayores es reduciendo el tiempo dedicado a la atención médica,” señala el Dr. Biese. El Dr. Biese, quien también forma parte de la junta directiva de West Health (una organización sin fines de lucro dedicada a mejorar la atención médica para los adultos mayores), destaca cómo la telemedicina puede ser especialmente valiosa.

Las personas mayores que viven en zonas rurales o que necesitan atención especializada pueden ahorrar aún más tiempo utilizando la telemedicina.

“Si tu médico de atención primaria necesita que veas a un hematólogo o a un endocrinólogo o a cualquier otro ‘ólogo,’ es probable que debas viajar varias horas, todo con el propósito de tener una conversación y transferir información médica.”

La telemedicina ofrece varios beneficios, especialmente para las personas mayores:

  • Ayuda a prevenir que las personas mayores se expongan a gérmenes o corran el riesgo de contraer enfermedades en las salas de espera de las clínicas.
  • Permite que las personas mayores consulten a sus médicos antes de lo que permitiría una cita en persona. La telemedicina agiliza el proceso y facilita la atención oportuna.
  • Facilita que los seres queridos, incluso aquellos que viven en otras ciudades o en otros estados, puedan asistir virtualmente a las citas médicas de sus familiares mayores.

“Mis abuelos viven en Puerto Rico, mientras que el resto de la familia reside en Atlanta y Florida,” dice Salgado. “Es realmente significativo poder participar en sus citas médicas. Nos brinda una comprensión completa de lo que está ocurriendo desde el punto de vista médico y además, podemos dar seguimiento con ellos después de las citas a nuestra conveniencia.”

Cómo prepararte para tu primera cita de telemedicina

Si nunca has tenido una cita de telemedicina, aquí tienes algunos consejos para estar preparado:

Asegúrate de tener a mano las instrucciones sobre cómo iniciar la sesión para la cita de telemedicina. Hazlo con anticipación por si surge algún problema. Si tienes dificultades y no estás seguro de cómo solucionarlo, llama al consultorio de tu médico.

Prueba la plataforma por tu cuenta. Si no te sientes seguro haciéndolo solo, pide ayuda a alguien de confianza. Algunos consultorios médicos incluso ofrecen pruebas algunos días antes de la cita. Asegúrate de descargar el programa o la aplicación necesaria para la cita. Además, verifica que el micrófono y la cámara de tu computadora o dispositivo móvil funcionen correctamente.

Prepárate para la cita de telemedicina como lo harías para una visita en persona. Anota cualquier pregunta que tengas para tu médico. Ten a mano una lista completa de los medicamentos que tomas y cualquier síntoma que puedas tener. Considera la posibilidad de que te acompañe un ser querido, tal como lo harías en una cita regular.

Busca un lugar silencioso y tranquilo en tu hogar para la cita. Evita intentar iniciar la cita de telemedicina mientras estás manejando o en un espacio público.

La tecnología y el bienestar

La tecnología utilizada en las citas de telemedicina también puede ofrecer versiones virtuales de casi cualquier otra actividad. Por lo tanto, los adultos mayores que encuentran difícil salir de casa por cualquier motivo pueden participar en grupos virtuales para hacer ejercicio, unirse a clubes de lectura o tomar clases de costura o cocina.

“Es verídico que la soledad y el aislamiento contribuyen sustancialmente al deterioro físico y cognitivo de las personas. Sin embargo, podemos utilizar la tecnología que tenemos para mantenernos en contacto con otras personas,” señala el Dr. Biese.

Si deseas encontrar una actividad que te agrade, busca “clases en línea para adultos mayores” en el Internet. La organización AARP (Asociación Americana de Personas Jubiladas) y las agencias locales dedicadas al envejecimiento también pueden ayudarte a descubrir actividades en línea que puedas disfrutar.

Estas plataformas permiten que los adultos mayores se mantengan en contacto con sus familiares, incluso cuando no pueden visitarse en persona. Así, las videoconferencias pueden prevenir la soledad en las personas mayores y también permitir que los familiares estén al tanto de la situación de sus parientes mayores. Además, las videoconferencias son de gran ayuda para los cuidadores de salud. Cuando las personas mayores participan en diversas actividades en línea, esto contribuye a reducir el riesgo de agotamiento en los cuidadores que los atienden, según lo señala Salgado.

Los relojes inteligentes, las aplicaciones y otros tipos de tecnología

Existen varios dispositivos diseñados para medir parámetros como el nivel de azúcar en la sangre, el ritmo cardíaco o la presión arterial. Estos dispositivos envían la información recopilada directamente a tu teléfono inteligente (o al de tu cuidador de salud) y también la comparten con tu médico de atención primaria. De esta manera, se puede llevar a cabo una vigilancia remota (a distancia) de tu salud.

“Para muchas personas con diabetes, es posible controlar la afección cómodamente desde casa, gracias a la asistencia de enfermeras y médicos virtuales que supervisan su progreso,” comenta Salgado. “Este enfoque es especialmente útil en las comunidades rurales.”

Además, los relojes y teléfonos inteligentes tienen la capacidad de rastrear tus pasos diarios y otras actividades físicas. Esto facilita el cumplimiento de tus objetivos de actividad física. Algunas aplicaciones incluso registran datos como las calorías consumidas y la cantidad de sal y carbohidratos ingeridos.

Cuando las personas mayores pueden visualizar el número de pasos que han dado en el día, junto con la información proporcionada por los dispositivos que miden el azúcar en la sangre o la presión arterial, se sienten más motivadas para cuidar su salud, según Salgado. Tener acceso a esta información les empodera y les permite mantenerse mentalmente activos.

Cómo agregar elementos digitales a tu atención médica

Si deseas incorporar más elementos digitales a tu atención médica, es probable que debas solicitarlo tú mismo. Aquí tienes algunas preguntas que puedes hacerle a tu médico:

  • ¿Podría cambiar algunas de mis citas de seguimiento en persona a citas de telemedicina?
  • ¿Qué dispositivos podría utilizar para monitorear mi salud y reducir algunas de mis visitas de seguimiento?
  • ¿Qué aplicación o dispositivo me recomienda para alcanzar mis objetivos de salud?
  • ¿Existe alguna aplicación o dispositivo que pueda ayudarme a administrar mis medicamentos diariamente?

La tecnología puede mejorar la atención médica, pero no la reemplaza

“Siempre será necesario visitar a tu médico en persona,” dice Salgado. “La telemedicina es una herramienta valiosa que puede complementar la atención tradicional, facilitar el seguimiento de tu progreso y contribuir a mejores resultados.”

Ver Fuentes

Crédito de la foto: E+/Getty Images

FUENTES:

Suleima Salgado, directora, Southeastern Telehealth Resource Center [Centro de Recursos de Telesalud del Sureste], Atlanta.

Kevin Biese, MD, doctor en medicina, director de la división de medicina de emergencias geriátricas en la facultad de medicina, University of North Carolina [la Universidad de Carolina del Norte], en Chapel Hill, Carolina del Norte.

JMIR Aging [la Revista de investigación médica por Internet—el envejecimiento]: “Understanding Older Adults’ Experiences With Technologies for Health Self-management: Interview Study [Cómo comprender las experiencias de los adultos mayores con las tecnologías para la autogestión de la salud: estudio de entrevista].”

Journal of the American Geriatrics Society [la Revista de la sociedad americana de geriatría]: “Older adults' perspectives on primary care telemedicine during the COVID-19 pandemic [Las perspectivas de los adultos mayores sobre la atención primaria por medio de la telemedicina durante la pandemia de COVID-19].”