
De todos los efectos secundarios que conlleva el tratamiento del VIH, el aumento de peso puede ser uno que no esperabas. Sin embargo, un número creciente de personas con VIH han desarrollado sobrepeso u obesidad. Si los cambios en tu cuerpo te preocupan, hay formas de abordarlos.
Establecer una relación sólida con tu equipo de atención médica es clave. Esto requiere comunicación clara y persistencia. Aquí tienes algunos consejos para obtener lo que necesitas en el consultorio médico.
Trata de encontrar la causa
Si tú y tu médico logran entender por qué estás subiendo de peso, podrían encontrar una solución.
- Algunos medicamentos antirretrovirales que se usan como tratamiento para el VIH pueden cambiar la forma en que tu cuerpo almacena grasa. Puede que aumentes de peso o notes un cambio en tu figura corporal. Cambiar de medicamento podría ayudar.
- Es posible que necesites ajustar tu dieta y estilo de vida a medida que el tratamiento te hace más saludable. Cuando tu cuerpo no está combatiendo infecciones, necesita menos calorías.
- El aumento de peso también podría no estar relacionado con el virus. Dado que el tratamiento antirretroviral permite que las personas con VIH vivan más tiempo, enfrentan el mismo riesgo que el resto de la gente de aumentar de peso con la edad. Esto también se puede abordar con cambios en el estilo de vida.
Lleva un registro detallado de lo que ocurre con tu cuerpo. Pésate y mide tu cintura regularmente, y anota los números. También puede ser útil tomar fotos para documentar los cambios en tu apariencia. Asimismo, asegúrate de medir tus niveles de azúcar en sangre y colesterol al menos una vez al año.
Recibe la atención que necesitas
Para manejar el aumento de peso relacionado con tu tratamiento de VIH, considera buscar un médico que comprenda bien el problema. Tu médico de atención primaria puede darte una derivación a un especialista. Tu ciudad también podría tener una clínica de VIH con expertos en tratamiento y una variedad de otros tipos de apoyo, como servicios de salud mental, dentales y sociales.
Podría ser útil investigar antes de hablar con tu médico. Los sitios web del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. y los Institutos Nacionales de la Salud son buenos puntos de partida. Tienen información integral en sus sitios web, HIV.gov y HIVinfo.NIH.gov, respectivamente.
Es buena idea ser escéptico cuando buscas información sobre el VIH en línea. Antes de confiar en lo que leas, averigua quién está detrás del sitio web y si simplemente te está proporcionando información o está intentando venderte algo. Busca artículos y estudios que provengan de expertos y estén actualizados. Y desconfía de los sitios que piden tus datos personales.
Habla con tu médico
Te sentirás más seguro al trabajar con tu médico si estás preparado para tus citas y tienes un plan establecido:
- Haz una lista de los temas que quieres discutir y las dudas que tengas. Tu tiempo será limitado, así que organízate según lo que tenga más prioridad para ti.
- Lleva notas sobre tu historial de salud, tratamiento, además de una lista de medicamentos y suplementos que tomas. Esto es especialmente importante si no siempre consultas con el mismo médico o si verás a alguien nuevo.
- Toma notas de lo que te dicen para no depender de la memoria. Considera llevar a un amigo o familiar para que también pueda prestar atención.
- Haz preguntas si algo no queda claro. Pide que repitan la información o la expliquen de otra manera.
- Insiste en que tus preocupaciones sobre el peso sean tomadas en serio. El sobrepeso puede afectar a tu salud general y ponerte en riesgo de diabetes, enfermedades hepáticas y problemas cardíacos.
No dudes en buscar una segunda opinión si no te sientes cómodo con tu médico por cualquier motivo. A veces, un médico en particular u otro proveedor de atención simplemente no es adecuado.
Otros recursos para conseguir ayuda
Ya sea que veas al mismo médico regularmente o no, también puede ser útil hablar con otros profesionales de atención médica:
- Tu clínica o consultorio médico puede contar con personal de enfermería, asistentes médicos o gestores de casos que pueden responder a muchas de las mismas preguntas que tu médico. Y es posible que puedan dedicarte más tiempo.
- Un nutricionista puede aconsejarte sobre un plan de alimentación que te mantenga saludable y ayude a tu organismo a luchar contra la infección sin aumentar de peso.
- Tu farmacéutico puede ser un gran recurso, especialmente si tiene mucha experiencia en medicamentos para el VIH. Pueden informarte sobre efectos secundarios e interacciones.
- Luchar con tu imagen corporal puede aumentar tus probabilidades de depresión. Si tienes este problema, considera pedir una derivación a un terapeuta o psicólogo. También te beneficiaría unirte a un grupo de apoyo para personas con VIH.
Conoce tus derechos
La mayoría de los médicos debe cumplir con ciertos estándares sobre la forma en que tratan a sus pacientes. Estos incluyen proporcionar información que necesitas para tomar decisiones sobre tu atención y respetar tus deseos.
Tu clínica u hospital puede explicarte otros derechos. Pregunta si hay un defensor de pacientes que te ayude.
También hay leyes nacionales que protegen tu privacidad y evitan el acceso no autorizado a tus registros médicos. Tu estado puede tener otras leyes; consulta con el departamento de salud local.
Ver Fuentes
Crédito de la foto: ADAM GAULT / SPL / Getty Images
FUENTES:
Current HIV/AIDS Reports: “Obesity And Weight Gain In Persons With HIV [Obesidad y aumento de peso en personas con VIH]”.
CATIE: “Body Weight and Body Shape Changes [Cambios en el peso y la figura corporal]”.
European AIDS Treatment Group: “Strategies for managing weight gain in HIV patients [Estrategias para controlar el aumento de peso en pacientes con VIH]”.
Nature: “HIV and antiretroviral therapy-related fat alterations [Alteraciones en la grasa relacionadas con el VIH y la terapia antirretroviral]”.
Instituto Nacional sobre el Envejecimiento: “Online Health Information: Is It Reliable? [Información de salud en línea: ¿es confiable?]”; “How to Prepare for a Doctor's Appointment [Cómo prepararte para una consulta con el médico]”.
HIV.gov: “Seeing Your Health Care Provider [Consultas con tu proveedor de atención médica]”; “Types of Providers [Tipos de proveedores]”; “Mental Health [Salud mental]”.
NIH News in Health: “Talking With Your Doctor [Cómo hablar con tu médico]”.
Johns Hopkins Medicine: “Don’t Be Shy: 4 Tips for Talking to Your Doctor [No sientas vergüenza: 4 consejos para hablar con tu médico]”.
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades: “Healthy Living With HIV [Vida saludable con VIH]”.
Womenshealth.gov: “Body Image [Imagen corporal]”.
Asociación Médica Estadounidense: “Patient Rights [Derechos de los pacientes]”.
Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.: “What are my health care rights and responsibilities? [¿Cuáles son mis derechos y responsabilidades sobre mi atención médica?]”.